Un altísimo porcentaje de los pacientes odontológicos necesitan fisioterapia. Está demostrado que la odontología, la fisioterapia y las disfunciones temporomandibulares van de la mano, por eso, un trabajo multidisciplinar es decisivo para un óptimo tratamiento.
A destacar la fisioterapia en pacientes bruxistas, ya que combinánadola con férulas de descarga la evolución del paciente es muy positiva. Tambíen es importante la fisioterapia antes y después de determinadas cirugías o de tratamientos que implican modificaciones estructurales como la ortodoncia.
Le llamamos ATM por simplificar, pero son muchas las partes implicadas. En la consulta de odontología se pueden apreciar síntomas en el paciente que a priori no parecen estar relacionadas con su campo de trabajo, sin embargo, nada más lejos de la realidad, por ese motivo, es importante conocer todos los síntomas que una disfunción temporomandibular puede generar.